El pío, pío de Twitter

Estamos ante una de las herramientas que, junto con otras redes sociales como Facebook o Instagram, forma parte de las más utilizadas para comunicarnos con el resto del mundo. Twitter en particular, por su formato de mensajes breves, suscita especial interés para expresar aquello que sucede alrededor nuestro o nuestros propios pensamientos, de forma rápida y concisa.

Dispone de una velocidad de propagación elevadísima, gracias a la utilización del sistema de retuits (reenvío de mensajes) y de la posibilidad de participación en líneas de debate sobre temas específicos a través de los hashtag (etiquetas temáticas).

El ámbito de aplicación de esta herramienta es muy extenso, utilizándola desde sectores profesionales como periodistas, políticos, “influencers”,… para transmitir en el acto noticias, hechos u opiniones que están sucediendo en ese propio y determinado momento. La inmediatez que proporciona esta herramienta es, en muchas ocasiones para los citados profesionales, un elemento de trabajo imprescindible. En otros entornos, incluido el educativo, podemos encontrar aplicaciones no menos efectivas mediante las que el uso de twitter puede sernos de gran utilidad. A modo de ejemplo, en el aula integramos twitter para trasladar a la red cualquier tipo de debate mediante la facilitación de un hashtag determinado, abriendo dicho debate más allá de los propios alumnos. Esto puede enriquecer y aportar nuevos contenidos y, como herramienta con las citadas características de rapidez e inmediatez, transformaremos el debate en un foro muy fluido y dinámico.

No podemos dejar de lado capacidades que añade Twitter como es la de incorporar imágenes, vídeos, encuesta y, como no, hacer saber al resto del mundo el lugar exacto en el que nos encontramos mientras tuiteamos. Todo ello hace que sea un buen complemento de trabajo o de diversión para sus usuarios.

Pero también tenemos una serie de inconvenientes que es necesario tener en cuenta:

• Su fugacidad temporal, consecuencia implícita de su inmediatez y su rapidez, provocan que el muro de mensajes pueda ser una constante cola de actualizaciones. Es decir, si tenemos un numeroso grupo de personas/entidades a los que seguimos y estos publican un elevado volumen de información, podemos encontrarnos con la tesitura de “perder” mucha información y disponer de una pila de mensajes intratables, perdiendo el hilo de determinados temas y/o debates.
• Otra de las desventajas es, como ya se ha mencionado, la brevedad de sus mensajes. Actualmente se ha ampliado (en fase beta) esa longitud. A pesar de ello, dicha limitación exige al usuario a ser sintético, a expresarse en muy pocos términos, cosa que en algunas situaciones puede resultar incómodo, poco práctico e incluso, según lo que se requiera transmitir, prácticamente imposible.
• También, como sucede en muchas redes sociales, nos encontramos con numerosos perfiles falsos, tanto de personas (sobretodo famosos, marcas comerciales,…) que pueden provocar seguimientos a esa clase de perfiles mientras los usuarios creen estar siguiendo a un perfil de una persona/entidad real, encontrando opiniones falsas y contradictorias, que lleven a situaciones de confusión o similares.
• Al tratarse de una red global, nos encontramos también con la posibilidad de usar esta herramienta como un elemento para agredir verbalmente y opinar de forma crítica sobre otros usuarios, directa o indirectamente.

Para concluir, y como opinión estrictamente personal, entiendo que Twitter es una muy buena herramienta de comunicación. Su inmediatez y la posibilidad de alcance global, así como la fácil localización de canales, eventos y usuarios que proporciona, permite que aquello que queremos transmitir resuene de forma amplia y nos podamos hacer eco de sucesos y comentar temas con usuarios alrededor de todo el mundo.

(Extraído de "El saco de unos y ceros")